Las razones por las que un abogado podría ayudarlo a evitar que su negocio quiebre

Actualmente los roles profesionales en Colombia han tenido grandes variaciones pues se han abierto enfoques donde antiguamente no había, por ejemplo, en el caso de los abogados, hay varias opciones en el ámbito corporativo, especialmente en los temas relacionados con la ley 1116 de 2006, mejor conocida como Régimen de Insolvencia.

Esta figura jurídica tiene como objetivo brindarle una opción a los actores empresariales para acogerse a un procedimiento legal que les permita celebrar un acuerdo de pago con sus acreedores y cumplir con sus obligaciones, esto mediante ciertas medidas, condiciones y requisitos particulares.

Aunque inicialmente esta medida, les suene alarmante a algunos, en realidad se ha convertido en una manera de proteger la economía, pues permite que las distintas unidades de explotación económica como empresas societarias, personas naturales comerciantes y no comerciantes, que atraviesan dificultades o limitaciones, puedan superarlas, recobrando su dinamismo, credibilidad y capacidad para honrar el crédito.

De acuerdo con cifras de la Superintendencia de Sociedades, a junio de 2019, 2.535 empresas comerciales habían optado por acogerse al Régimen de Insolvencia previsto en la ley 1116 de 2006.

Esta situación ha dado apertura a nuevos espacios de desarrollo profesional, en particular para los abogados que tradicionalmente han jugado de lado de los acreedores, recuperando el crédito a través de la ejecución judicial, pero a costa de la existencia misma de la unidad económica de explotación, con las consecuencias que ello trae en términos de empleo y crecimiento.

Una de esas organizaciones que se desarrolla en servicios corporativos es Villamizar Asociados, pues además de ofrecer asesoría con este tipo de temas, cuenta con amplia experiencia y un equipo de trabajo multidisciplinario necesarios para manejar los asuntos relacionados con el Régimen de Insolvencia colombiano.