Corte Interamericana rechazó recusación del Estado y le pidió respeto por su independencia
Según el tribunal internacional al no sustentar debidamente su petición el Gobierno colombiano generó el efecto adverso de tratar de silenciar a los jueces.
La Corte Interamericana de Derechos Humanos (Corte IDH) rechazó la recusación del representante del Estado colombiano Camilo Gómez en contra de todos los magistrados de ese tribunal, a excepción de Eduardo Vio Grossi. Todo lo anterior enmarcado en el caso que investiga la violación sexual que sufrió la periodista Jineth Bedoya a manos de paramilitares en el año 2000.
Para los jueces, cada una de sus preguntas estuvieron encaminadas en recabar información sobre un caso novedoso e impactante para ellos, lo cual no puede ameritar un "prejuzgamiento". En cambio indicaron que la recusación del gobierno sin un sustento claro es inaceptable.
"...si bien el incidente promovido tiene la aparente intención de perseguir el resguardo de la imparcialidad de este Tribunal, su efecto sería precisamente el contrario: silenciar a los Jueces y a la Jueza coartándolos en el ejercicio de su libertad expresión en el marco de su ejercicio jurisdiccional, de modo que su actuar se amolde al parecer o interés de una de las partes", criticaron.
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Incluso, le pidieron al Estado sacarlos de cualquier "conjetura", que mine su reputación.
"Los juzgadores tienen derecho a quedar a salvo de suposiciones o conjeturas, que aún formuladas de buena fe, pudieran afectar su imagen e incidir en la buena marcha de la justicia. La independencia y la imparcialidad de los Jueces y las Juezas deben ser, asimismo, respetadas por quienes litigan ante la Corte", sentenciaron.
Como punto final expresaron tener la confianza de que el Estado colombiano aceptará su decisión y permitirá la continuidad del proceso como se desarrolla hasta el momento.