Otra decisión provoca señalamientos a la nueva Sala de la Corte Suprema de Justicia
Negó la recusación en contra del magistrado Jorge Caldas, que pasó de procurador delegado ante la Corte a juez del proceso.
Tras el jalón de orejas de la Sala de Casación Penal a la nueva Sala de Juzgamiento de la Corte Suprema la semana pasada, por el caso Maza Márquez, otra vez una decisión pone en la mira a este alto tribunal.
Esta vez, se negó la recusación contra el magistrado Jorge Caldas en el caso de la exfiscal Hilda Niño Farfán. Cabe recordar que ella es acusada de supuestamente favorecer procesos de ex paramilitares en el programa de Justicia y Paz.
La W conoció que esta decisión ha sido cuestionada por varios magistrados de la Corte, porque esta nueva Sala de Juzgamiento permitió que Caldas asumiera dicho proceso como juez. Esto se produce después de haberlo conocido como procurador delegado ante la Corte Suprema de Justicia, puntualmente en 2017, cuando la exfiscal fue enviada a prisión.
La audiencia por la cual la exfiscal acusó al magistrado Caldas se realizó el 14 de junio de 2017 cuando, como procurador, advirtió que debía estar privada de su libertad porque podría seguir cometiendo acciones delictivas que comprometían el proceso en su contra.